El sueño no ha terminado: Crowded House reanuda la gira con la Serie SL.
Más de un año después de que se pospusieran las giras internacionales, la icónica banda Crowded House ha vuelto al escenario en su país natal, Nueva Zelanda, con control, nitidez y directividad en su sonido.
La banda de cinco músicos tenía previsto pasar el año 2021 en una gira internacional, pero finalmente redujeron sus planes para ceñirse a Nueva Zelanda. Al ser una de las primeras giras nacionales que se reanudaba, para el equipo técnico era de la máxima importancia que la gira «To The Island» ofreciera la mejor calidad de sonido y voz.
Para la parada en la Isla Norte neozelandesa, el proveedor local de sonido Western Audio recomendó d&b y la banda eligió los sistemas KSL y GSL con el software ArrayProcessing. Para el equipo de la gira, era indispensable que el sistema fuera flexible y dinámico tanto para salas con aforos interiores de 2.000 personas como para estadios con aforos de 8.500.
KSL y GSL forman parte de la Serie SL de d&b y traen al mercado prestaciones que incluyen directividad de banda ancha y rango completo, respuesta de LF ampliada y opciones avanzadas de rigging en un paquete de alto rendimiento y tamaño accesible. Todos los altavoces de la Serie SL se construyen con un diseño activo de 2 vías.
«En el estadio, la relación entre riggings principales y laterales era tan fluida, que muchas veces podía girar el lateral más de lo normal, aproximadamente entre 55 y 70 grados, y seguir teniendo una gran cobertura», comenta Bjarne Hemmingsen, técnico de sistemas.
Con la COVID-19 bajo control en Nueva Zelanda y sin limitaciones para las reuniones masivas ni requisitos sobre distancia interpersonal, la banda tocó con lleno total noche tras noche. Para asegurar que la misma calidad excelente de sonido llegue a cada persona del público, el equipo confió plenamente en la función de optimización de arreglos en línea del software ArrayProcessing.
«Desde el FoH, el concierto se situaba en un promedio de 94 a 97 dBA, y aplicar ArrayProcessing optimizó mucho el nivel tonal en toda el área de cobertura y supuso una gran diferencia para las personas que estaban en las filas traseras», destaca Hemmingsen.
En la gira solo había de una a dos noches entre conciertos, por lo que la gestión del tiempo era una prioridad para el equipo: por suerte, el rigging rápido y seguro de la Serie SL y el potente paquete de software de d&b permitieron realizar la planificación eficiente y predecible de una cobertura uniforme.
Según Hemmingsen y el equipo de audio, la gira fue muy bien recibida por los espectadores y la banda por igual, y es que todos estaban deseando volver a vivir otra vez en persona sonido en directo.