d&b Soundscape llena de vida el lanzamiento del álbum de Mouse on Mars en el MIT.
A medida que el sistema d&b Soundscape recién presentado continúa su despliegue internacional, inevitablemente se va encontrando con todo tipo de compañeros creativos e inspiradores. Una de esas relaciones se ha establecido con el aclamado dúo berlinés de pop electrónico experimental, Mouse on Mars. El dúo creativo que hay detrás de Mouse on Mars, los amigos de toda la vida Jan St. Werner y Andi Toma, aprovecharon el potencial de d&b Soundscape como herramienta perfecta con la que demostrar las complejas dimensiones aurales en capas de su nuevo álbum multicolaborativo, Dimensional People.
El acto de lanzamiento del álbum, presentado con la ayuda de robots que tocaban instrumentos de percusión, tuvo lugar durante una conferencia en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) titulada "Dissolve Music" [Disolver la música].
Para Mouse on Mars, era el entorno ideal en el que exhibir la especial "mezcla espacial" de su nuevo álbum gracias a d&b Soundscape. “En este álbum, el material, de tantos músicos y colaboradores, era tan denso, con tantos elementos, que no queríamos reducirlo a una mezcla estéreo”, explica St. Werner. “Por lo tanto, surgió la idea de hacer una "mezcla espacial" y, naturalmente, aprovechamos la oportunidad.
” En muchos sentidos, Soundscape es una tecnología que ellos estaban esperando. Toma nos lo explica: “Siempre hemos intentado mezclar nuestra música como si fuera una experiencia espacial, con los sonidos yendo y viniendo, como si la música te rodeara. Soundscape, como tecnología espacial, realmente hace que esto sea posible, y la herramienta se convierte en un instrumento adicional.
” St. Werner añade, “Con Soundscape, ya no te ves limitado a esa perspectiva estéreo y realmente puedes caminar por el sonido. Se tiene una experiencia muy diferente, de estar de verdad dentro de él.
” La reseña del acto de presentación por el periodista Jon Pareles en el New York Times explicaba: “Ritmos, tanto grabados como robóticos, rebotando por todas partes; tonos de sirena que remontan en espiral alrededor; voces e instrumentos grabados que podrían, y lo hacen, surgir de cualquier punto de la sala. El efecto era al mismo tiempo analítico, clarificando cada elemento, e inmersivo, incluso desorientador, pero de la mejor manera".